Invertir en las propiedades comerciales o residenciales de los EE. UU. es una opción atractiva para que los extranjeros desarrollen y preserven su patrimonio. El mero tamaño del mercado da lugar a muchas opciones financieramente lucrativas que satisfacen las necesidades de cada inversionista.
Ya sea que apunte a diversificar sus inversiones, proteger su capital de inversión, aprovechar las tendencias emergentes o generar un flujo de efectivo positivo, un enfoque optimizado y bien concebido es fundamental. A continuación, se incluye una guía concisa del proceso de inversión y de las estrategias para optimizar retornos al mismo tiempo que gestiona los riesgos asociados con las inversiones fuera de los Estados Unidos.
Paso 1: planificación previa e implicaciones fiscales
Antes de comprar una propiedad, debe comprender las implicaciones fiscales en los EE. UU. y en su país de origen, y garantizar el cumplimiento de todas las leyes y reglamentaciones vigentes. Esto también incluye tener en cuenta la estructura de propiedad, la mitigación de los riesgos a través del seguro y el proceso de debida diligencia que deberá seguir para analizar cada propiedad.
Al incorporar dinero al sistema bancario de los EE. UU, su banco proporcionará los formularios necesarios para cumplir con las leyes y reglamentaciones bancarias estadounidenses. Antes de completar los formularios, cada inversionista debe consultar con su abogado y profesionales de impuestos.
Paso 2: aspectos para tener en cuenta en la planificación patrimonial
Antes de comprar bienes inmuebles, debe tener en cuenta cómo se incorporará el activo a su estructura de planificación patrimonial actual. Esto incluye evaluar la estructura de financiación óptima y cuál es la mejor forma de transferir la propiedad. Garantizar la estructura y la inclusión en su plan patrimonial de sus inversiones inmobiliarias en los EE. UU. por lo general requerirá asesoramiento legal en EE. UU. y en su país de origen.
Paso 3: determinar la estructura de propiedad adecuada
Las distintas estructuras de propiedad ofrecen diferentes niveles de privacidad, cobertura de responsabilidad civil y beneficios fiscales. Un contador fiscal debidamente calificado con experiencia de trabajar con inversionistas extranjeros, junto con un abogado, puede recomendar la estructura óptima acorde a sus necesidades. Una vez que haya seleccionado la estructura legal que desee, crear y gestionar las entidades legales adecuadas, por lo general, es un proceso relativamente ágil en los EE. UU.
Paso 4: obtener financiamiento
Las hipotecas de inversión ofrecidas a los residentes extranjeros disponen de diferentes términos en relación con las hipotecas residenciales comunes. Los programas nacionales de hipotecas para extranjeros ofrecen tasas competitivas y una variedad de productos de préstamo, los cuales incluyen hipotecas con tasas ajustables 5/1, 7/1 y 10/1. Las hipotecas pueden financiar distintos tipos de propiedades, incluyendo viviendas para vacaciones, propiedades para inversión, viviendas unifamiliares y condominios.
Normalmente, los prestatarios internacionales deberán proporcionar pagos iniciales más altos. Según la estructura de financiación y propiedad, el proceso de solicitud requerirá más tiempo para identificar, reunir y analizar los documentos relevantes del negocio y personales.
Paso 5: explorar el proceso de compra
Cada mercado inmobiliario tiene prácticas únicas. Los inversionistas deben comprender las condiciones y costumbres del mercado local, dado que varían en gran medida dentro de los EE. UU. Este conocimiento puede garantizar que los inversionistas sean competitivos cuando presenten una oferta para una propiedad. Explorar el mercado, visitar las posibles ubicaciones, realizar inspecciones y presentar ofertas requiere un conocimiento detallado del proceso y las mejores prácticas para garantizar una transacción exitosa.
Idealmente, el agente inmobiliario que usted involucra debería tener la experiencia de trabajar con compradores internacionales. Esto incluye la predisposición para adaptar sus horarios a las diferentes zonas horarias y realizar muestras en línea en caso de que no pueda ver una propiedad en persona.
Paso 6: administrar la inversión
Según el bien inmobiliario que adquiera, involucrar a un equipo de gestión de propiedades puede ser una decisión inteligente. Esto adquiere especial relevancia si la inversión genera ingresos por alquiler como una propiedad comercial o residencial y requiere la gestión práctica de inquilinos.
Un equipo de gestión de propiedades asumirá la responsabilidad de evaluar, seleccionar y gestionar a los inquilinos. También puede ayudar a mitigar las obligaciones y asumir la responsabilidad primaria por la gestión cotidiana. Una gestión prudente de la propiedad también exige comprar un seguro de propiedad y de responsabilidad civil para mitigar el riesgo de las pérdidas y demandas.
Asegúrese de que la empresa de gestión de la propiedad mantenga libros y registros precisos en relación con la propiedad, incluyendo los ingresos obtenidos y los gastos incurridos. Esto facilitará la presentación de impuestos estatales y federales.
Conclusión
El mercado inmobiliario puede ser una fuente estable de ingresos pasivos, puede ofrecer significativas deducciones fiscales y puede brindar protección contra la inflación. Cada etapa del proceso requiere una orientación por parte de expertos, que es fundamental cuando un comprador reside en el extranjero y se encuentra sujeto a leyes y reglamentaciones en el país de origen y en los EE. UU.
La conformación de un equipo eficiente de profesionales les permite a los inversionistas extranjeros reducir de manera considerable la exposición al riesgo, mejorar su comprensión del mercado inmobiliario de los EE. UU. y ampliar las posibilidades de adquirir propiedades que cumplan con sus objetivos de inversión y respalden su éxito financiero a largo plazo.
Comuníquese con uno de nuestros banqueros de Valley, que le brindará ayuda durante todo el proceso.
Para fines informativos/educativos únicamente. La información en este contenido no constituye asesoramiento legal, fiscal ni de inversión.
